Para quienes siguen nuestro trabajo y publicaciones, es conocido el diagnóstico sobre los desafíos estructurales que enfrentan las áreas de compliance dentro de las compañías:
- Crisis de identidad del rol de compliance: En que enfocan el trabajo con un prisma de auditoría, confundiendo y perdiendo el propósito del el rol de segunda línea.: apoyar al negocio en la gestión de sus riesgos.
- “Los incumplimientos se deben a una falta o debilidad de la cultura organizacional”: El abordar la falta de la llamada “Cultura de Compliance” a través de capacitación y comunicaciones, en vez de sentarse con las áreas de negocio a entender su realidad y armar controles que les hagan sentido (y se hagan cargo de sus limitaciones de recursos).
- Foco normativo: El desarrollo de procesos de control desde una perspectiva de las normas, des indexados de la realidad y prioridades de negocio. Por ejemplo, hablar del Modelo de Prevención de Delitos en vez de los desafíos de compliance del área de operaciones (que por cierto son muchos más que únicamente el alcance del MPD).
Este año hemos sistematizado y empaquetado nuestro modelo y enfoque. El éxito del trabajo viene de abordar las necesidades de nuestros clientes y, a la vez de sus clientes internos, bajo la premisa de “hacer negocios de la manera correcta”.
¿Qué hemos estado empaquetando? Utilizamos el concepto de “Patrones de Diseño”, en el mundo de la tecnología son soluciones generales y reutilizables para un problema común dentro de un determinado contexto, en este caso la Gestión de Compliance. No son recetas, sino que estructuras que sirven de base para no tener que repensar y reescribir soluciones y reinventar la rueda frente a cada nuevo desafío. Algunas de estas nuevas soluciones parte de nuestros servicios son:
- Interacciones de Cargos Expuestos: modelamos una solución que permite tomar control de las diferentes interacciones de los Colaboradores, como por ejemplo con Autoridades o competidores. Apoyando que la compañía genere prueba de su debida diligencias, pasando del mero registro al análisis y toma de decisiones.
- Gestión de Obligaciones de Contratos: permite tomar controlar del estatus de cumplimiento o no, de las obligaciones más relevantes, en los segmentos más críticos de las relaciones contractuales. Lo anterior, integrando la perspectiva del negocio como la de compliance. Nuestros clientes, ven el valor de pasar de gestionar el “ciclo de vida” del documento a las obligaciones de proveedores o clientes con el negocio y viceversa.
- Gestión de Compliance Ambiental Regulatorio (no-financiero): gestionar la efectividad de los controles, pasando del levantamiento de procesos y hallazgos de auditoría a “sentarse” con los responsables de la operación y apoyarlos en ser más efectivos. Aportamos un modelo que permite dejar atrás el checklist de regulaciones específicas para centrar la discusión en tener data que permita responder la pregunta ¿hemos hecho todo lo necesario desde la perspectiva regulatoria para nuestro siguiente ciclo productivo?.
Nuestro foco el 2023 es escalar la implementación de estas soluciones para acelerar la adopción de estas prácticas en nuestros clientes.
Para nosotros gobernanza se traduce simplemente en ser capaz de gestionar que uno está haciendo lo que uno se propuso hacer y lo que la ley exige. Nuestra propuesta de valor es enfrentar la complejidad que pesa sobre las compañías con soluciones que incorporen un modelo de gestión que se haga cargo de estos desafíos, de manera predecible y priorizada en el tiempo, y escalando al resto de la organización las soluciones exitosas. En nuestra experiencia el foco debería ser asumir la complejidad del negocio en vez de evadirla.